Fundación Iberdrola España, junto con el Ministerio de Cultura de Portugal y la Junta de Castilla y León, están llevando a cabo desde 2010 un ambicioso proyecto de restauración y mantenimiento del conjunto monumental del arte románico en 24 templos situados en el norte de Portugal y en España, en las inmediaciones de los ríos Duero y Támega (en Salamanca y Zamora). Con esta iniciativa de intervención conjunta, denominada Plan de Intervención Románico Atlántico, se busca recuperar el patrimonio cultural, natural y social de la región, llevar a cabo una labor de dinamización socioeconómica y potenciar los lazos transfronterizos entre España y Portugal, uniendo los esfuerzos de Administraciones del Estado, Iglesia y de la iniciativa empresarial y privada de ambos países.
El 23 de septiembre de 2010 se firmó un convenio en Bragança, Portugal, ratificado por Juan Vicente Herrera (Presidente de la Junta de Castilla y León), Gabriela Canavilhas (Ministra portuguesa de Cultura) y Manuel Marín (Presidente de Fundación Iberdrola España). El acto de firma contó, también, con la participación de Ignacio Galán (Presidente de Iberdrola), Paula Silva (Directora Regional de la zona norte del Ministerio de Cultura portugués, actualmente reconvertido en Secretaría de Estado) y Mª José Salgueiro (Consejera de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León).
El proyecto intensifica el compromiso entre Iberdrola, Castilla y León -donde grupo Iberdrola nació en 1901- y Portugal, país donde el grupo tiene importantes proyectos, en especial la construcción en el río Támega de uno de los mayores aprovechamientos hidroeléctricos de Europa. El Plan de Intervención Románico Atlántico actúa en 24 iglesias, 13 en Portugal y 11 en España: 6 en la provincia de Zamora, 8 en el distrito portugués de Vila Real, 1 en el distrito portugués de Porto, 5 en la provincia de Salamanca y 4 en el distrito de Bragança.
El Plan de Intervención Románico Atlántico comprende dos tipos de actuaciones diferenciadas: por un lado, se incluyen actuaciones integrales consistentes en la intervención arquitectónica en el templo, la rehabilitación de su entorno más inmediato, la mejora de la iluminación y la instalación de un sistema de monitorización de determinados parámetros (temperatura, humedad, vibraciones, movimientos, etc.). Por otro lado, se contemplan actuaciones centradas en el mantenimiento del sistema de monitorización y en la renovación de las instalaciones eléctricas, con un sistema de iluminación ornamental más innovador y eficiente, compatible con los valores histórico-artísticos de los bienes patrimoniales.
La Fundación Santa María La Real, institución de referencia en el ámbito de la restauración de arte románico, ha sido clave en el diseño y ejecución técnica de los trabajos, que se realizan en constante colaboración con los obispados de las zonas en las que se actúa. Entre sus aportaciones se encuentra el desarrollo del sistema de monitorización conocido como Monitoring Heritage System (MHS, Sistema de Monitorización del Patrimonio) que estudia el edificio para conocer sus características y evolución histórica, y el equipamiento que es necesario para asegurar su conservación, y coloca pequeños sensores en lugares estratégicos del templo que controlan parámetros ambientales.
Los datos obtenidos son enviados periódicamente a un centro de control donde se evalúan. Una vez concluidas las obras en cada una de las iglesias, los técnicos editan un folleto explicativo de todo el proceso para su entrega a los vecinos, a quienes además se les facilita una serie de consejos útiles y sencillos para contribuir a un mejor mantenimiento y conservación de los templos.
http://www.romanicoatlantico.org/es/el-proyecto