Las hipotecas variables están agotando sus subidas y podrán empezar a dar un respiro a las familias españolas. Una tendencia que llega de la mano del parón que vive el euríbor gracias al tiempo que se está tomando el Banco Central Europeo.
Las continuas alzas de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE) continúan ejerciendo presión sobre el mercado hipotecario. A pesar de la pausa temporal anunciada por el BCE para evitar mayores incrementos en el precio del dinero durante los próximos meses, el euríbor, índice de referencia para la mayoría de las hipotecas en España, ha experimentado un nuevo aumento en octubre. Sin embargo, esta subida mensual ha sido la más moderada en dos años, lo que indica cierta estabilización. En concreto, el índice cerró el décimo mes de 2023 en un 4,16%, apenas 0,011 puntos porcentuales por encima del registrado en septiembre, cuando comenzó a repuntar después de la caída en agosto. Desde abril de 2022, el euríbor ha mantenido una tendencia al alza, pasando de valores negativos a superar el 4%.
Ante esta situación, muchos españoles se preguntan cuándo se reducirán las cuotas hipotecarias. Prever este escenario es complicado, ya que tanto los precios como los tipos de interés son factores clave que determinan el comportamiento del euríbor, y es difícil prever su evolución. Sin embargo, tanto la inflación como los tipos de interés parecen haber alcanzado su punto máximo, lo que ha llevado al BCE a establecer una pausa en la escalada de las tasas de interés. Esto podría indicar que el índice hipotecario también ha llegado a su punto álgido. Funcas, Bankinter y CaixaBank sugieren esta posibilidad en sus previsiones para finales de 2023 y el próximo año.
Hipotecas
Funcas, la Fundación de las Cajas de Ahorro, pronostica que el euríbor cerrará 2023 con una media anual del 4,07% y se reducirá al 3,51% en 2024. Además, en su última estimación, anticipa una disminución de 20 puntos básicos en el índice durante el último trimestre de 2023, situándolo en el 3,97% en los primeros tres meses del próximo año, el 3,83% en el segundo trimestre, el 3,68% en el tercero y el 3,51% en el último trimestre de 2024. Aunque se espera una reducción en el costo de las hipotecas a partir del final de este año, no se prevé que sea significativa debido a la continuación de tipos de interés relativamente elevados.
En contraste, los analistas de Bankinter son menos optimistas y prevén que el euríbor se sitúe en el 4,10% a finales de 2023, bajando al 3,90% en 2024 y al 3,40% en 2025. Aunque estas estimaciones indican una disminución en el precio de las hipotecas, seguirán siendo elevadas en comparación con las tasas registradas hace un año y medio. Esta predicción es menos favorable que la que realizaron en junio de este año.
Por su parte, CaixaBank estima que las cuotas de las hipotecas variables no descenderán hasta la primavera de 2024. La entidad espera que el índice de referencia esté por debajo del 3,86% en mayo, cifra que marcó en el mismo mes de 2023. Además, prevén que el euríbor cierre el año en el 4,08% y empeore sus previsiones para 2024, situándolo en el 3,06%,aunque en su estimación anterior esperaban que estuviera por debajo del 3%.
Esta tendencia a la baja podría generar un aumento en la demanda de hipotecas hacia finales del próximo año. En septiembre, CaixaBank registró la firma de 57.000 nuevos créditos hipotecarios, con un volumen total de 6.680 millones de euros. Aunque esto representa una disminución del 37% en comparación con los primeros nueve meses de 2022, se espera que la demanda aumente a medida que las condiciones hipotecarias se vuelvan más favorables.