Irene Montero quiere hacerse un hueco en Europa después de haber sido purgada del Gobierno de Pedro Sánchez.
Podemos confirmó que la exministra de Igualdad concurrirá en solitario a las elecciones europeas de junio de 2024 y que será la cabeza de cartel, en lo que se ha interpretado como la última esperanza de Podemos para sobrevivir a Sumar.
El círculo se cierra para los morados en los mismos comicios donde dieron la campanada en 2014, cuando obtuvieron cinco escaños. Con una candidatura entonces encabezada por Pablo Iglesias, flanqueado por Teresa Rodríguez, el exfiscal Anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo, Lola Sánchez y Pablo Echenique.
«Siempre es necesario arriesgar. Podemos es una herramienta política que nunca ha pensado en preservar cuotas de poder, sino en usar esos espacios de poder institucional para transformar y avanzar», señaló este lunes Montero en TVE.
Sin embargo, es precisamente el hecho de haber perdido su cuota de poder dentro de Sumar lo que ha empujado a Podemos a presentarse a las elecciones europeas en solitario, con Montero como reclamo.
Al tratarse de unos comicios que se disputan a circunscripción única, la exministra de Igualdad tiene posibilidades de obtener un escaño. Uno que le garantizaría una vida sin apreturas económicas durante los cinco años que duran las legislaturas en la UE.
Sueldo y dietas
El diario ‘El Debate’ explica que como eurodiputada, Montero cobraría un sueldo neto de 7.776,06 euros mensuales, según las cifras oficiales del Parlamento europeo para este 2023. En realidad, brutos son 9.975,42 euros, pero de esa cantidad hay que descontar el impuesto de la Unión y el pago de una cotización a un seguro de accidentes.