Madrid y Barcelona son las primeras ciudades españolas en implementar Zonas de Bajas Emisiones, restringiendo la circulación de vehículos sin etiqueta ambiental. Aunque esta medida se presenta como una solución política a problemas medioambientales, se cuestiona la falta de coherencia de algunos políticos que abogan por la transición a vehículos eléctricos, pero no siguen ese ejemplo en sus elecciones de vehículos personales.
Según una investigación del diario ‘El Debate’, al revisar las declaraciones de bienes presentadas por los 350 diputados en la última formación de la cámara, solo dos políticos declararon tener un vehículo eléctrico Tesla (con etiqueta Cero). Se sugiere que el resto de los diputados enfrentarían dificultades para llegar al Congreso, estacionar y asistir a los discursos de toma de posesión sin recibir multas de 200 euros, ya que la mayoría de ellos posee vehículos antiguos y altamente contaminantes.
Pedro Luis Huguet del PP y Antonio Rodríguez del PSOE son identificados como los únicos diputados que declaran poseer un coche eléctrico, en este caso, un Tesla Model Y y un Model S, respectivamente. La mayoría de los demás diputados mencionados en el artículo conducen vehículos de marcas convencionales, tanto de lujo como generalistas, y en su mayoría son de combustión interna.
Se destaca que ni el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ni el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, declaran poseer un coche en sus declaraciones de bienes. Además, se mencionan los vehículos de figuras políticas relevantes como Santiago Abascal, quien afirma tener un Jeep Commander y una motocicleta BMW, Teresa Ribera con un Renault Clio híbrido (etiqueta Eco), y Yolanda Díaz con un VW Golf y un Touran de varios años.
El artículo sugiere que la falta de adopción de vehículos eléctricos por parte de los políticos podría cuestionar la coherencia entre las políticas ambientales impulsadas y la práctica personal de los legisladores.
100 coches aparcados
En enero de 2022, el Gobierno del PSOE-Podemos compró 2022 una flota de 100 coches eléctricos que a día de hoy no son usados ni por el mismo Sánchez ni por ninguno de sus ministros.
Una hipocresía cuando se conoce que el Consejo de Ministros aprobó una deducción del 15% en el IRPF para la compra de vehículos eléctricos. Es decir, impulsado a que los españoles utilicen un tipo de vehículos en los que no se suben ni el presidente, ni sus ministros.
En concreto, el Gobierno de España licitó en enero de 2022 la compra de 100 vehículos oficiales de la marca Nissan Leaf (turismo de 40 kWh) con un valor por unidad de 29.282 euros, de los cuales, según datos de la Memoria Anual del Parque Móvil del Estado, que gestiona Hacienda, los vehículos están destinados a «flota» («a disposición del Parque Móvil del Estado, sin ministerio/organismo fijo asignado»).
El diario ‘El Economista’ aclara que ni el propio Sánchez ni ninguno de sus ministros viaja en estos coches o hace uso oficial de ellos.
El citado medio precisa que, según la misma memoria, otro dato llamativo es que casi todos los vehículos que se han comprado durante la era Sánchez (desde 2018) y que se han destinado a ministerios son híbridos, siendo el Ford Mondeo el más habitual. La única excepción es que, para el Ministerio de la Presidencia, se han destinado dos coches eléctricos Renault ZOE con un valor promedio por unidad de 23.000 euros.
En cuanto a los vehículos destinados a Presidencia del Gobierno, hay tanto híbridos (16 Ford Mondeo, 16 Toyota Prius y 1 Renault Megane), como eléctricos (14 Renault ZOE y 2 Renault Kangoo). Aparece también para Presidencia un Ford Kuga del que no se especifica que sea híbrido (como sí especifica en el resto de los modelos híbridos), por lo que probablemente sea de combustión.