El Gobierno de Pedro Sánchez está actualmente evaluando la posibilidad de establecer restricciones a los planes de expansión de Saudi Telecom (STC) en la participación accionaria del grupo Telefónica. Inicialmente, STC buscaba adquirir hasta un 9,9% de Telefónica, pero esto está sujeto a la notificación formal por parte del grupo controlado por el Fondo de Inversiones Públicas.
Según informó la agencia Bloomberg, el gobierno de Pedro Sánchez está considerando imponer restricciones similares a las que se aplicaron en otras transacciones. Entre las medidas que se están contemplando se encuentran límites a la venta de activos y restricciones en el pago de dividendos por parte de STC.
También se mencionan disposiciones similares a las que se aplicaron en 2021 en la compra del 23% de Naturgy Energy Group por parte del fondo australiano IFM Global Infrastructure, según una fuente familiarizada con el asunto.

Saudi Telecom
Estas condiciones podrían incluir el respaldo a ciertas políticas empresariales, como la inversión en proyectos de alcance nacional, el mantenimiento del registro legal y la sede de la empresa en España, junto con una política de dividendos conservadora y un grado de inversión adecuado. Además, el comprador podría ser requerido a abstenerse o apoyar cualquier propuesta de privatización de la empresa.
Aún no se ha tomado una decisión definitiva sobre la participación de STC en Telefónica, y el Gobierno podría optar por aplicar una cláusula de salvaguardia con condiciones diferentes a las establecidas para otras empresas estratégicas.
Los portavoces de la oficina del presidente del Gobierno español, así como representantes de Telefónica y Saudi Telecom, se han abstenido de hacer comentarios al respecto.
Sin embargo, un portavoz del Ministerio de Economía hizo referencia a los comentarios de la vicepresidenta primera y responsable de Economía, Nadia Calvino, quien confirmó que hasta la fecha de su declaración no tenía evidencia documentada de los planes de STC en relación con la participación accionaria en Telefónica, más allá del 4,9% que se reveló hace dos semanas.