Los ciclos combinados han asumido un protagonismo récord para garantizar la estabilidad del sistema

La producción eléctrica con gas se dispara un 50 % tras el apagón y la actuación de Red Eléctrica de España

Desde el 28 de abril, los ciclos combinados han asumido un protagonismo récord para garantizar la estabilidad del sistema, aunque con un fuerte coste ambiental

Gas natural
Gas natural 24h

Entre mayo y octubre de 2025, la generación de electricidad mediante centrales de ciclo combinado (gas-natural) en España aumentó en torno al 50 % respecto al mismo periodo del año anterior, al pasar de aproximadamente 16.600 GWh a 25.114 GWh, según datos publicados por Red Eléctrica de España (REE).

Este fuerte incremento se debe a la activación de un modo de gestión reforzada del sistema eléctrico implementado por la REE tras el apagón del 28 de abril, cuando solo seis centrales síncronas estaban programadas, lo que redujo la capacidad de absorber energía reactiva y provocó inestabilidad.

Qué ha pasado

A raíz del apagón, el operador del sistema decidió aumentar la operatividad de las centrales de ciclo combinado para reforzar la seguridad del suministro y controlar posibles sobretensiones. Este cambio de estrategia ha generado dos efectos claros:

  • Un importante alza en la producción con gas natural, que ahora representa una parte significativamente mayor del mix de generación en esos meses.
  • Un impacto medioambiental relevante: las emisiones de dióxido de carbono (CO₂) derivadas de esa operación reforzada sumaron unas 2,54 millones de toneladas adicionales, lo que implica un aumento del 47 % respecto al mismo periodo anterior.
  • Las grandes generadoras como Naturgy aprovecharon este contexto. Su producción en ciclos combinados creció un 70,4 % entre enero y septiembre, hasta casi 9.984 GWh, generando un EBITDA de 304 millones de euros en esta línea de negocio, un 83 % más que el año anterior.

Consecuencias para el sector y los consumidores

Este cambio tiene múltiples dimensiones:

  • En el plano técnico, refuerza la percepción de que la generación flexible con gas sigue siendo esencial para evitar apagones, sobre todo cuando las renovables no pueden cubrir la demanda o existe riesgo de inestabilidad de la red.
  • En lo económico, surge un coste elevado: los servicios de ajuste para esta gestión reforzada alcanzaron unos 3.300 millones de euros en el periodo, frente a los 2.400 millones del año anterior. Las comercializadoras del mercado libre denuncian que deben absorber costes no regulados que podrían repercutir en tarifas futuras.
  • En lo medioambiental, el mayor uso del gas entra en tensión directa con los objetivos de reducción de emisiones. Mientras las energías limpias toman fuerza, este aumento de los ciclos combinados supone un paso atrás en materia de sostenibilidad.

Conclusión

El encendido reforzado de la generación con gas natural ha sido la solución inmediata del sistema eléctrico español para superar el apagón y asegurar la estabilidad energética. Sin embargo, esta vía tiene un alto coste: mayor emisión de CO₂, coste económico elevado y dependencia continua de combustibles fósiles. El reto ahora es doble, lograr que las redes sean más seguras y flexibles sin que el impulso actual comprometa los objetivos de descarbonización y asequibilidad de la electricidad.