Pedro Sánchez se estrelló.
El presidente del Gobierno aseguró el pasado 5 de junio que la economía española “va como una moto”. Solo días después, el informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) echaba por tierra el optimismo del líder del PSOE al demostrar los demoledores indicadores del país.
El economista Daniel Lacalle destaca que los datos de la OCDE ratifican que España se quedó como la última economía en recuperar su PIB previo a la pandemia del COVID-19. Un dato que evidencia que hay mucho ruido, pero muy pocas nueces en la reactivación económica del país.
No es el único dato que manda a la lona al Gobierno PSOE-Podemos. A pesar de que el Ministerio del Trabajo y el Ministerio de Seguridad Social han buscado maquillar todas las cifras del empleo para simular una recuperación laboral, la OCDE sitúa a España como el país con la mayor tasa de desempleo de toda la organización internacional.
Además, la OCDE destaca que la inflación acumulada, desde 2019, asciende hasta el 15% (lo que supone un duro golpe al poder adquisitivo de los españoles), situándose por encima de la media. Sin olvidar que la deuda pública asciende al 110% del PIB.
"La economía española va como una moto"
– La OCDE deja a España como la última en recuperar el PIB de 2019.
– La mayor tasa de paro de toda la OCDE.
– Inflación acumulada desde 2019 15% y estimada superior a la media.
– Deuda PIB 110%. #LaMejorEspaña para el sanchismo… pic.twitter.com/HlWzzzvgnD— Daniel Lacalle (@dlacalle) June 8, 2023
Aunque la organización internacional apunta a que la economía española crecerá un 2,1% en 2023 y un 1,9% en 2024, también advierten de que se trata de una desaceleración con respecto al avance del 5,5% de los dos últimos años.
Además, pese a reconocer que la retirada progresiva de las medidas anticrisis corregirá el déficit público en 2023 y 2024, las previsiones de la OCDE no esperan que España cumpla con el objetivo comprometido con Bruselas de reducirlo al 3% el próximo año.
El INE tampoco ratifica el optimismo de Sánchez, ya que el Índice de Producción Industrial (IPI) cayó un 4% interanual en abril, es decir 9,4 puntos menos que en marzo y su mayor retroceso desde enero de 2021.
Esta caída supone el regreso a las tasas interanuales negativas después de haber registrado en marzo un aumento del 5,4%.
Un dato preocupante, ya que se trata de uno de los indicadores de actividad más destacados y mide la salud de la producción de industrias extractivas, manufactureras y de producción y distribución de energía eléctrica, agua y gas. Es decir, del desempeño industrial de un país.
Al final, todo apunta a que la economía no va como una moto, sino que es Sánchez quien está intentando ‘vender la moto’ a todos los españoles.