Federico Jiménez Losantos ahondó en el éxito político y económico de Isabel Díaz Ayuso.
Durante su entrevista con el diario ‘El Mundo’, el director y presentador del programa radiofónico ‘Es la mañana de Federico’ explicó que “Andalucía ha seguido el libreto de Ayuso”. En este sentido, indica que el modelo de la presidenta de la Comunidad de Madrid sí es exportable al resto de España.
“Isabel no es que sea muy de leer, pero ha leído a los clásicos fundamentales: Hayek, Mises, conoce a Revel, a Aron. Y los principios los tiene claros. Tiene un sentido instintivo de la libertad y lo defiende con rabia, porque a ella como mujer le ha costado salir adelante”, precisó el periodista.
A lo que agregó: “Con Ayuso nace un liderazgo natural en la derecha que era impensable. Es un personaje que esperaba su momento. Y cuando llega demuestra dos cosas: valor y frialdad a la vez”.
Finalmente, Jiménez Losantos desveló que “ella es cálida, pero en el pensamiento es muy calculadora, no se deja llevar. Sabe muy bien que su momento no es ahora: está para después de un gobierno de Feijóo, salga bien o mal, y en eso va a ser leal. Después de una o dos legislaturas será su momento. Es joven”.
«Ella es una persona frágil pero no débil. Tiene cuatro ideas muy claras y las sirve con un olfato político que se tiene o no se tiene. Y lo tiene desde el principio. Esa historia machista de que todo es por Miguel Ángel Rodríguez… El mérito de Ayuso es puramente personal, pero la clave es que primero tenía una idea de Madrid que es también un proyecto político para España: no es nacionalismo madrileño, es al revés».
«Ella se cría en Sotillo de la Adrada, en Ávila. No ha habido nunca un hombre importante en su vida: todo lo ha hecho ella. No ha tenido un padrino político. Y llega de carambola. Pero es fría. Consigue a base de paciencia que al final la señora Monasterio y el señor Iván acepten que sea presidenta. Y tenía desde el primer día redactado el decreto de disolución y convocatoria electoral, escondido en un cajón. No improvisa nada. Lo escribe todo. Luego está el elemento estético. Tiene una belleza distinta, de española de antes. Dice Raúl del Pozo que recuerda a una estrella de cine mudo y es verdad: ¡es Pola Negri en Madame Du Barry de Lubitsch!», sentenció.