Rubén Sánchez es una pieza clave en la guerra del Gobierno contra los supermercados.
En su participación en el programa ‘Todo es Mentira’ del 4 de abril, el secretario general y portavoz de Facua reconoció abiertamente que está presionando al Gobierno de Pedro Sánchez para impulsar la medida de topar los precios de algunos productos alimentarios.
“Estamos reclamándole al Gobierno que meta mano al sector, que ponga precios máximos y fuerce que haya bajadas de precios, a que retornen a lo que costaban hace medio año o nueve meses (…) pero el Gobierno no está por la labor”, se lamentó Sánchez.
A pesar de que sus palabras pasaron por la tertulia sin generar ningún sobresalto, suponen un reconocimiento de que están realizando (desde Facua) una presión sobre el Gobierno del PSOE-Podemos para tomar la polémica medida que podrá hacer saltar por los aires la cadena de producción.
Es importante recordar que, en septiembre de 2022, Yolanda Díaz anunció que “estamos estudiando” la opción de topar los precios de alimentos. Un anuncio que rápidamente contó con el apoyo de Facua y de su portavoz, quien llamó a “intervenir precios” y cargó contra las empresas del sector.
“Muchas empresas están especulando con los precios y aumentando de forma injustificada sus márgenes de beneficio”, indicó Sánchez en aquel momento.
Ahora, sus palabras en ‘Todo es Mentira’ hacen intuir que la idea de topar los precios no nació en Moncloa, sino que fue trasladada desde Facua [y otros sectores cercanos a Yolanda Díaz] con el objetivo de forzar una gran intervención del Estado en la cadena de alimentación.
Una propuesta que, a pesar de que no logró salir adelante pese a los anuncios de Díaz, no descartan seguir promoviendo durante los meses previos a las elecciones generales. Sin contar de que podría convertirse en una realidad en el caso de que la líder de Sumar llegue a conquistar las votaciones y se libre de los frenos del PSOE.
Sánchez también aprovechó su intervención en el programa presentado por Risto Mejide para cargar contra el socialista Luis Planas, ministro de Agricultura, y contra la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia por no tomar en consideración las denuncias lanzadas por Facua para el control de los supermercados.
«Han recibido unas cuentas denuncias de Facua y ni nos contentan”, criticó el portavoz de Facua en relación a la CNMC.
Contra las empresas
Sánchez también acusó a supermercados como Carrefour o Eroski de lanzar campañas de descuentos en ciertos productos para “frenar cualquier tipo de amago o posibilidad de que se introduzcan regulaciones en el sector”.
En este sentido, hizo un llamamiento a una especie de ‘cacería de brujas’: “Nos gustaría que alguna administración de Consumo [de las comunidades autónomas] o el Ministerio del Consumo de Alberto Garzón se lanzara a hacer un análisis exhaustivo de la evolución de los precios de los 1.000 productos anunciados por Eroski para ver si podemos hablar de publicidad engañosa y tomar medidas”.
Contraofensiva
El 24 de marzo, los supermercados decidieron fichar a un famoso expolítico que les ayude a contrarrestar la ofensiva lanzada desde Moncloa.
Se trata de Josep Antoni Duran i Lleida, quien fue nombrado presidente de Asedas, la patronal que agrupa a firmas de primer nivel como Mercadona, Lidl, Dia y Consum. La llegada del expolítico de CiU no es casual, ya que además de ser una de las caras catalanas más conocidas en las últimas tres décadas, cuenta con el respaldo tanto de la izquierda y de la derecha moderada.
Al ocupar el cargo que estaba en las manos de Antonio Garrigues Walker, Duran i Lleida tendrá que afrontar una labor intensa de lobby y negociaciones con dos claros objetivos en el horizonte: evitar que se topen los precios de los alimentos como proponen desde Unidas Podemos; y, sobretodo, esquivar el mismo destino que sufren las eléctricas y los bancos: es decir, ser castigados por el Gobierno con elevados impuestos por los supuestos beneficios extraordinarios fruto de la inflación.
El nuevo presidente de Asedas cuenta con una potente agenda que le podría permitir dar guerra al Gobierno de Pedro Sánchez. Es importante recodar que pasó 25 años dentro del Congreso de los Diputados, pasando posteriormente al Parlamento de Cataluña durante cinco años más y, cuando dejó la política, se dedicó a la abogacía.
Lejos de alejarse del sector público, Duran i Lleida acabó dentro del consejo de Aena. Ahí demostró que cuenta con la confianza de Pedro Sánchez, ya que bajo su Gobierno el consejo de Aena le nombra como consejero independiente para sustituir a Josep Piqué. En otras palabras, cuenta con el respeto del presidente del Gobierno, lo que supone un gran paso para negociar en nombre de los supermercados.
La figura de Duran i Lleida representa, según la organización, no solo los valores que tratan de inspirar las decisiones de Asedas desde su fundación hace más de 20 años, sino también sus objetivos presentes, al afrontar importantes retos como la sostenibilidad medioambiental, económica y social del modelo de distribución alimentaria de nuestro país, en un momento de cambio condicionado, además, por la grave crisis multifactorial que estamos viviendo.