La inflación solo está tomando un respiro antes de volver a crecer en España.
El Índice de Precios de Consumo (IPC) registró en junio el mejor dato de inflación en dos años, con una subida anual de apenas el 1,9%, cumpliendo por fin el objetivo marcado por el Banco Central Europeo (BCE). «España es la primera gran economía de la zona euro en reducir la inflación por debajo del 2%», celebraba el Gobierno este jueves, tras publicarse la cifra por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
A pesar de las aparentes mejoras en la inflación en España, la realidad es que los expertos advierten que esta tendencia será de corta duración. Aunque en junio de 2023 la inflación haya descendido al 1,9%, principalmente debido a un efecto estadístico al comparar los precios actuales con los del año anterior, esta mejoría no se mantendrá por mucho tiempo. Según los expertos, es muy probable que la inflación repunte nuevamente en julio o, a más tardar, en agosto, y se estima que al cierre del año se sitúe cerca del 5%.
¿Por qué ocurrirá esto? En primer lugar, el mencionado efecto estadístico que favoreció la disminución de la inflación en junio jugará en contra durante el resto del año. Después de alcanzar su punto máximo en el verano de 2022, los precios de la energía comenzaron a descender y ahora se mantienen relativamente estables en niveles más bajos. Esto significa que en los próximos meses la diferencia en el componente energético no será tan significativa y no restará tanto al índice de precios.
Pero hay otro factor clave que contribuirá al repunte inflacionario: los precios han estado aumentando sin cesar desde enero, y en el primer semestre han experimentado un incremento del 2,5% (3% si se excluyen los componentes más volátiles como la energía y los alimentos frescos). En otras palabras, los precios siguen subiendo con una intensidad mayor a la habitual.
La economista senior de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), Mª Jesús Fernández, advierte que no se debe dar demasiado valor al índice de inflación del 1,9% en junio, ya que se espera que vuelva a subir. En su opinión, esto demuestra que la inflación está lejos de ser un problema resuelto.
En resumen, si bien es cierto que la subida de precios se ha desacelerado en comparación con el año pasado, cuando la inflación alcanzó un 1,9% en junio debido al fuerte encarecimiento de la energía, no se puede afirmar que la crisis inflacionaria esté superada. Se espera que las tasas de inflación en España sigan siendo positivas en el corto plazo, salvo por los efectos estacionales de algún mes en particular.
Además, en el segundo semestre España no se beneficiará de comparativas favorables con la Unión Europea. Durante la primera mitad de 2022, nuestro país experimentó una inflación más elevada que el promedio de la UE. Sin embargo, a partir de septiembre, España ha estado en una posición más favorable en comparación con la media europea, con tasas anuales significativamente más bajas gracias a una menor dependencia del gas ruso y a la diversificación de proveedores energéticos.
No obstante, debido a esta razón, se espera que la inflación en España vuelva a aumentar, mientras que la UE, que experimentó tasas de inflación más altas en la segunda mitad de 2022, se beneficiará de este «efecto base» y seguirá su tendencia descendente. Como resultado, es posible que a finales de año ambas tasas de inflación converjan, es decir, que España y la Unión Europea terminen teniendo una inflación similar.
Estas previsiones son respaldadas por Funcas, que sostiene que la inflación en España disminuirá para luego volver a subir, mientras que en la Unión Europea probablemente continuará descendiendo. Esto podría llevar a que ambas tasas se aproximen a niveles similares a finales de año, situándose por encima del 4%, según afirma Mª Jesús Fernández.
Aunque se espera que el repunte de la inflación en España ocurra en julio, según las previsiones de Funcas, esto no tendría un costo electoral para el Gobierno. El Instituto Nacional de Estadística (INE) no publicará el avance del IPC del mes hasta el 28 de julio, una semana después de las elecciones del 23 de junio. Además, el 13 de julio, una semana antes de las elecciones, el INE publicará el detalle del dato de junio, lo que permitirá al Gobierno resaltar nuevamente la reducción de la inflación por debajo del 2% y, por tanto, promover su gestión en el control de esta crisis de precios en comparación con el resto de la UE, gracias a las medidas implementadas.