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La cotización de Telefónica ha sufrido un desplome monumental en la jornada de hoy, cayendo alrededor de un 11% y arrastrando consigo al IBEX 35. La oleada de ventas se produce después de que el Grupo Telefónica presentara su nuevo plan estratégico y anunciara formalmente la reducción a la mitad de su dividendo a partir de 2026.
La jornada del lunes ya había anticipado la presión, con la operadora perdiendo más de un 2%, situándose como el segundo peor valor del índice. Sin embargo, la confirmación oficial del recorte del dividendo hoy ha provocado una caída aún más severa.
Los detalles del recorte y el plan estratégico
El recorte del dividendo era un escenario que el mercado ya venía descontando, siendo visto por analistas como una alternativa a una ampliación de capital. Este movimiento marca la sexta ocasión en tres décadas en la que la operadora se ve forzada a rebajar o suspender la remuneración al accionista.
Reducción de la retribución al accionista
Telefónica ha confirmado una reducción a la mitad del dividendo de 2026, estableciéndolo en 0,15 euros por acción en efectivo, pagadero en junio de 2027. Esta decisión forma parte del nuevo plan estratégico de la compañía y permite a la multinacional ahorrar unos 850 millones de euros respecto a la retribución de este año.
El objetivo de la operadora es rebajar la rentabilidad por dividendo desde el 6,6% estimado para este año hasta el 4,8%, buscando que la ratio quede más alineada con el resto de comparables europeos. Analistas de XTB indican que el cambio busca «fortalecer el balance y generar liquidez para inversiones». Para 2025, el dividendo total estimado es de 0,30 euros, con 0,15 euros pagaderos en diciembre de 2025 y otros 0,15 euros en junio de 2026.
Respecto al medio plazo (2027 y 2028), el pago se basará en un rango de entre el 40% y el 60% del flujo de caja libre (FCF) base, pagadero en junio del año siguiente.
Las claves del ‘Transform & Grow’
El nuevo plan estratégico, denominado ‘Transform & Grow’ (Transformación y Crecimiento), no contempla ampliaciones de capital ni grandes operaciones corporativas inmediatas, pero sí garantiza que la teleco estará lista para «capturar las oportunidades que se presenten y generen valor a los accionistas». Las compras y fusiones futuras se centrarán en los mercados core del grupo: España, Alemania, Reino Unido y Brasil.
El plan se centra en la simplificación del modelo operativo, incluyendo la redimensión del centro corporativo y de las unidades de negocio globales, buscando generar eficiencias concretas y medibles. Se espera generar ahorros de 2.300 millones de euros en 2028 y 3.000 millones en 2030.
Metas financieras clave hasta 2030:
- Deuda y apalancamiento: el objetivo es reducir el apalancamiento hasta aproximadamente 2,5 veces la deuda neta sobre EBITDAaL para 2028, frente al ratio actual de 2,9, lo cual es crucial para respaldar la calificación de grado de inversión.
- Crecimiento de ingresos: se espera que las ventas crezcan entre un 1,5-2,5% durante 2025-2028, acelerándose hasta el 2,5-3,5% entre 2028 y 2030.
- Inversión: la inversión (capex) se reducirá hasta aproximadamente el 12% en el periodo de referencia, con una disminución mayor hasta aproximadamente el 11% para 2030.
El presidente de Telefónica, Marc Murtra, ha señalado que las áreas de mejora consisten en corregir la «divergencia entre la visión estratégica y el contexto de negocio», y reducir la «aversión a tomar decisiones difíciles». También se ha constatado la gran complejidad organizativa y operativa del grupo, la escasa flexibilidad financiera y la lentitud en la ejecución.
Resultados del tercer trimestre de 2025
El plan estratégico coincide con la publicación de unos resultados del tercer trimestre de 2025 que han quedado por debajo de las expectativas en varias métricas clave, especialmente en beneficios.
El beneficio neto de las operaciones continuadas cayó un 45% en comparación con el 3T 24, situándose en 271 millones de euros. Otros resultados clave del 3T25 (vs. 3T 24):
- Ingresos: 8.957 millones de euros (-1,5%).
- EBITDA: 2.867 millones de euros (-8%).
- EBIT: 952 millones de euros (-18%).
- Generación de caja (FCF): Telefónica ha revisado a la baja la previsión de FCF para 2025, desde «similar a 2024» a «en torno a 1.900 millones de euros». La generación de caja operativa incumplió la previsión.
- Deuda neta: la deuda neta aumentó en 626 millones de euros respecto al 2T 25, situándose en 28.233 millones de euros.
Historial de recortes: la necesidad de enderezar la compañía
La pérdida de atractivo por rentabilidad es interpretada por los analistas como una respuesta lógica a la pérdida de atractivo por la reducción del dividendo. Sergio Ávila, analista de IG, explica que la caída encaja con un reajuste de valoración: «si Telefónica rebaja el dividendo para alinearlo con la media europea, el atractivo por ‘yield’ se reduce y el mercado pasa a exigir más ejecución”.
Los recortes anteriores de dividendos en Telefónica se produjeron en contextos muy diferentes:
- 2021 (cargo a 2020): debido a los efectos de la pandemia, se redujo el dividendo a 0,3 euros por acción (frente a 0,4 euros), una medida adoptada por otros operadores europeos.
- 2017 (cargo a 2016): Fue una medida forzada por el entonces presidente José María Álvarez-Pallete para mantener los ratings de inversión de la deuda, después de fracasar la venta de O2 en Reino Unido y la salida a bolsa de Telxius. Se redujo de 0,55 euros a 0,4 euros.
- 2012: Se suspendió el dividendo (1,50 euros por acción) en medio de la crisis de deuda europea, con el objetivo de ahorrar 10.200 millones de euros.
- 1998: Se anunció que no se pagaría dividendo durante dos años para financiar la expansión en América Latina.
El estado del IBEX 35: arrastrado por la incertidumbre
Hoy el IBEX 35 registra caídas de alrededor del 1,3%, arrastrado por el desplome de Telefónica, y trata de sostenerse sobre la marca de los 15.800 puntos.
El sentimiento general del mercado está afectado por la incertidumbre y la toma de beneficios tras las fuertes subidas acumuladas. Ayer el principal indicador nacional cerró prácticamente plano, con una subida insignificante del 0,03%, hasta los 16.037 puntos. A pesar de esta presión reciente, el IBEX 35 aún acumula unas ganancias impresionantes del 38,31% en lo que va de año. La semana pasada, la bolsa española se acercaba a los máximos históricos de cierre de 16.150 puntos.
En la jornada actual, el rojo impera en el selectivo español. Aparte de Telefónica, otros grandes valores sufren caídas significativas: Arcelor Mittal (-3%), Fluidra (-2%), y bancos como Santander y Bankinter se dejan cerca del 2%. Ayer, además de Telefónica, Inditex (-0,9%), BBVA (-0,77%), e Iberdrola (-0,17%) también bajaron.
Solo unos pocos valores logran mantenerse a flote hoy: Enagás y Acciona Energía avanzan un 0,4%, seguidos por Naturgy y BBVA. Ayer, entre los grandes valores, solo subieron Repsol (+0,54%) y Banco Santander (+0,24%).
La tendencia bajista no es exclusiva de España. El escepticismo reina en el resto de Bolsas europeas, con el Dax alemán cediendo un 1,5% y el Cac francés y el Euro Stoxx 50 restando un 1,3%. Los expertos de Bankinter justifican estas caídas como una corrección sana tras las fuertes subidas acumuladas. Esta incertidumbre se extiende a Wall Street, cuyos futuros avanzan sin un rumbo fijo, afectados por dudas sobre la desaceleración de la apuesta por la Inteligencia Artificial (IA) y la suspensión de la mayoría de los datos económicos estadounidenses debido al cierre del gobierno.
La corrección que sufre el IBEX 35 en esta jornada, arrastrado por el peso de Telefónica, actúa como un recordatorio de que, incluso en un ciclo alcista que ha visto al S&P 500 y al MSCI All Country World acumular sus rachas positivas más largas desde 2021, el mercado exige disciplina financiera y ejecución de las empresas. Si Telefónica logra cumplir las metas de eficiencia y reducción de deuda estipuladas en el nuevo plan, la acción, a pesar de la volatilidad a corto plazo, podría «ganar calidad y el riesgo percibido disminuirá».
