Israel y Hamás han alcanzado un acuerdo fundamental para la implementación de la primera fase del plan de paz para Gaza propuesto por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, marcando el primer paso para el fin de la guerra en la Franja. El acuerdo, suscrito la madrugada de este jueves en Egipto tras cuatro días de negociaciones indirectas, incluye un alto el fuego, la liberación de rehenes israelíes a cambio de prisioneros palestinos, la retirada parcial del Ejército israelí y la entrada de ayuda humanitaria.
El anuncio inicial fue realizado por el presidente estadounidense Donald Trump a través de su red social Truth Social. Trump proclamó que «todas las partes recibirán un trato justo» y calificó el logro como un «gran día para el mundo árabe y musulmán, Israel, todas las naciones vecinas y los Estados Unidos». Según Trump, los rehenes de Israel serán liberados «probablemente el lunes».
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, celebró el acuerdo calificándolo de «un gran día para Israel» y un «éxito diplomático y una victoria nacional y moral». Netanyahu prometió la liberación de «todos» los rehenes que permanecen en Gaza, de los cuales unos 48 permanecen bajo custodia de Hamás, con alrededor de 20 aún vivos. El Gobierno israelí tiene previsto reunirse esta tarde, a partir de las 17:00 hora israelí (16:00h en la España peninsular), para dar luz verde al acuerdo.
Por su parte, Hamás confirmó el pacto para «poner fin a la guerra en Gaza, retirar la ocupación, permitir la entrada de ayuda humanitaria e intercambiar prisioneros». La organización palestina ha entregado a los mediadores una lista solicitando la liberación de unos 1.950 prisioneros palestinos, incluyendo 250 con cadenas perpetuas y 1.700 presos de Gaza. Hamás agradeció los esfuerzos de los mediadores (Qatar, Egipto, Turquía y Estados Unidos) e instó a que se «obligue» a Israel a «implementar plenamente» los compromisos del acuerdo.
Entrada en vigor y retirada de tropas
Fuentes israelíes han indicado que el pacto se firmará este mediodía (hora israelí; 11:00 en la España peninsular) y el alto el fuego entrará en vigor sobre el terreno en el mismo momento de la firma. Además, en las primeras 24 horas de vigor del alto el fuego, el ejército israelí completará la primera fase de su retirada parcial.
Aunque Trump anunció que la liberación de rehenes sería el lunes, otras fuentes israelíes informaron que la liberación se producirá entre el sábado y el lunes, comenzando el sábado con los que aún siguen con vida.
A pesar del anuncio, el Ejército israelí ha advertido que la ciudad de Gaza se sigue considerando «zona de combate peligroso», y que regresar a ella es «extremadamente peligroso». Por ello, el Gobierno de Gaza ha pedido a sus ciudadanos que extremen la precaución y eviten las carreteras clave como Saladino y Al-Rashid ante posibles ataques israelíes.
Respaldo internacional y visión de paz
La comunidad internacional ha celebrado el entendimiento. El secretario general de la ONU, António Guterres, dio la bienvenida al compromiso, agradeciendo los esfuerzos diplomáticos de los mediadores. Guterres instó a que el alto el fuego se consolide de forma permanente y se garantice la entrada inmediata de ayuda humanitaria esencial para Gaza. Tom Fletcher, jefe de Asuntos Humanitarios de la ONU, aseguró que los equipos del organismo están «totalmente movilizados» para iniciar una entrega de ayuda humanitaria «a la escala necesaria».
El presidente palestino, Mahmud Abbas, celebró el acuerdo, expresando su «esperanza» de que este avance conduzca a una solución política permanente que ponga fin a la ocupación israelí y permita el establecimiento de un Estado palestino con Jerusalén Este como capital y basado en las fronteras de 1967. Abbas también aprovechó para reivindicar el rol de la Autoridad Nacional Palestina en la Gaza de la posguerra.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, también celebró la «esperanza inmensa» que el acuerdo supone, y urgió a las partes a respetarlo estrictamente, señalando que el pacto «debe marcar el final de la guerra y la apertura de una solución política basada en la solución de dos Estados». Trump, quien ha sido nominado al Premio Nobel de la Paz por diversos países, espera que este acuerdo sea la «octava» guerra que resuelve, confiando en que Gaza sea reconstruida.