Impacto laboral y reestructuración en la industria azucarera española

Azucarera ejecuta un ERE para 251 empleados y cierra su histórica planta en La Bañeza

La decisión de Azucarera afecta a más de una cuarta parte de su plantilla y supone el fin de la producción en León tras décadas de actividad

Azucarera ejecuta un ERE para 251 empleados y cierra su histórica planta en La Bañeza

La noticia ha sacudido tanto al sector agroalimentario como a la sociedad leonesa: Azucarera, propiedad del grupo británico Associated British Foods (AB Foods), ha anunciado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 251 trabajadores en España, junto con el cierre definitivo de la planta de La Bañeza (León), uno de los centros históricos de la producción azucarera nacional.

El ajuste, que representa aproximadamente un 26% de la plantilla total —944 empleados—, impactará a todos los centros productivos, incluidas las oficinas centrales en Madrid y Barcelona. Especialmente significativa es la repercusión en Castilla y León, donde se prevén 203 despidos: 126 solo en La Bañeza, otros 50 en Miranda de Ebro (Burgos) y 26 en la planta de Toro (Zamora).

Causas y contexto: una tormenta perfecta para el sector

La dirección de Azucarera justifica este duro recorte por una combinación de factores económicos, productivos y organizativos que llevan años lastrando el negocio:

  • Elevados costes operativos derivados del mantenimiento de varias plantas abiertas.
  • Volatilidad del precio del azúcar, agravada por la entrada masiva de importaciones desde terceros países en condiciones más ventajosas.
  • Caída significativa en las producciones de remolacha, a raíz de restricciones regulatorias como la prohibición del uso de ciertas sustancias fitosanitarias.
  • Incremento sostenido del coste energético y materias primas, que afecta a toda la industria agroalimentaria europea.
  • Resultados económicos negativos: solo este año fiscal, AB Foods ya ha anticipado pérdidas cercanas a los 47 millones de euros para su división azucarera española.

La empresa admite que los esfuerzos realizados hasta ahora, tanto en inversiones como en innovación comercial, no han dado los frutos esperados. Por ello, centra ahora su estrategia en asegurar la sostenibilidad futura del negocio mediante una reorganización radical.

Así queda el mapa productivo tras el ajuste

Tras el cierre de La Bañeza y el cese parcial en Miranda de Ebro, Azucarera concentrará toda la molturación de remolacha en la fábrica zamorana de Toro. Miranda se mantendrá operativa únicamente como refinería para azúcar importado de caña, mientras que los centros logísticos y de envasado seguirán activos en Jerez (Cádiz) y Benavente (Zamora).

Tabla resumen:

PlantaSituación post-ERENúmero estimado afectados
La Bañeza (León)Cierre total126
Miranda de EbroSolo refinería caña50
Toro (Zamora)Única molturadora remolacha26
Jerez (Cádiz)Centro envasado activo11
Benavente (Zamora)Centro envasado activo1
Oficinas Madrid/BCNReducción

Reacción sindical e incertidumbre social

Los sindicatos han reaccionado con rotundo rechazo. Tanto Comisiones Obreras como UGT FICA han exigido revertir los despidos y reclaman un frente común entre administraciones para defender el empleo industrial. El inicio del periodo oficial de consultas abre ahora una ventana negociadora de cuatro semanas donde se intentarán pactar medidas menos traumáticas —como salidas escalonadas o recolocaciones— aunque el margen parece escaso ante el cierre inminente.

Para León y su entorno rural, este anuncio supone un mazazo. La planta era un referente industrial desde hace décadas y motor económico para centenares de familias directamente empleadas y miles más vinculadas a través del cultivo remolachero. El temor al impacto social es palpable entre trabajadores, agricultores y autoridades locales.

Una crisis estructural para el azúcar español

Este ajuste no es un hecho aislado. La crisis que vive Azucarera refleja desafíos globales: precios internacionales presionados, competencia feroz desde fuera del continente europeo y nuevas normas medioambientales. Las empresas buscan ser más eficientes pero también sobreviven con plantillas reducidas.

En paralelo, el futuro del cultivo nacional de remolacha queda aún más cuestionado. El cierre reduce alternativas para los agricultores locales justo cuando se reclama más soberanía alimentaria frente a las incertidumbres globales.

Perspectivas: concentración, eficiencia… ¿y empleo?

Azucarera defiende que esta reorganización permitirá centrar recursos en innovación agronómica, ganar eficiencia al concentrar toda la molturación norteña en Toro e intentar recuperar competitividad internacional. Sin embargo, ese giro estratégico deja por el camino centenares de empleos industriales estables y reabre el debate sobre cómo proteger sectores tradicionales ante las grandes transformaciones del mercado.

La negociación sindical será clave durante las próximas semanas. Mientras tanto, León despide uno de sus símbolos industriales y cientos de familias afrontan un futuro lleno de incertidumbre.

Autor

24h Economía

Te acercamos a la Economía. Toda la actualidad económica y política en 24heconomia.com y en sus redes sociales.