El gigante francés de la distribución Alcampo ha anunciado este jueves un profundo plan de reestructuración que sacude el panorama del retail español. La compañía cerrará 25 supermercados, reducirá la superficie de 15 hipermercados y despedirá a 710 trabajadores, lo que representa aproximadamente el 3% de su plantilla total en España, que alcanza los 23.300 empleados.

La decisión llega en un momento de transformación para el sector, donde los consumidores muestran una clara preferencia por establecimientos más pequeños, cercanos y adaptados a sus necesidades diarias. Alcampo, que sufrió una caída del 1% en sus ventas durante 2024, situándose en 5.004 millones de euros, busca con esta medida «recuperar los resultados y asegurar un crecimiento sostenible».

Un ajuste «difícil pero necesario»

La compañía ha calificado esta decisión como «difícil, pero responsable y necesaria» en un comunicado dirigido a los representantes de los trabajadores. Aunque Alcampo no ha especificado qué establecimientos cerrarán definitivamente, sí ha comunicado que los despidos afectarán a más de un centenar de centros distribuidos por diversas comunidades autónomas, incluyendo Madrid, La Rioja, Cantabria, Navarra, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Galicia, Aragón, Asturias y País Vasco.

Entre los hipermercados afectados por los despidos se encuentran los ubicados en Alcorcón, La Vega, Majadahonda, Castellón, Albacete, Sanlúcar, Jerez y Sevilla Este. Según los cálculos de la empresa, en el 68% de los casos los despidos afectarán a entre uno y tres trabajadores por establecimiento.

La herencia de la compra a Dia

Buena parte de los cierres afectan a tiendas adquiridas en 2023 dentro del paquete de 224 locales comprados a la cadena Dia. Alcampo reconoce ahora que algunos de estos establecimientos «no se adaptaban a su modelo, su localización no era la deseable o tenían una tasa de esfuerzo excesiva». Esta operación, que buscaba aumentar la capilaridad y cercanía de Alcampo a sus clientes, no ha dado los resultados esperados en todos los casos.

«El comercio está viviendo una profunda transformación y es por ello que Alcampo, a lo largo de los últimos años, refuerza su inversión en proyectos de futuro evolucionando a un comercio multiformato y multicanal», explica la compañía, que actualmente cuenta con 526 centros en España: 80 hipermercados y 446 supermercados, de los cuales 130 son franquiciados.

Redimensionamiento del formato hipermercado

Además del cierre de supermercados, Alcampo ha iniciado un proceso de reducción de la superficie de 15 de sus 80 hipermercados en España. Esta medida refleja la crisis del modelo de hipermercado tradicional, que viene perdiendo terreno frente a formatos más pequeños y ágiles, así como ante el avance imparable del comercio electrónico.

La estrategia de Alcampo pasa ahora por adaptarse a los nuevos hábitos de consumo, donde los clientes prefieren establecimientos más pequeños y convenientes. En paralelo, la compañía ha anunciado la renovación de más de 60 tiendas, con mejoras tanto en diseño como en tecnología, y el refuerzo de su canal digital para hacer frente a la creciente competencia del sector.

Reacción sindical y próximos pasos

Los sindicatos, como CCOO, ya han manifestado que su objetivo principal en la negociación será «el mantenimiento del empleo y, en el caso de que haya salidas de personas trabajadoras, estas salgan en las mejores condiciones posibles». El siguiente paso en este proceso será la constitución de la mesa negociadora del despido colectivo.

Este ajuste de Alcampo se produce en un contexto de fuerte competencia en el sector de la distribución alimentaria en España, donde cadenas como Mercadona continúan ganando cuota de mercado. La transformación de los hábitos de consumo, acelerada tras la pandemia, está obligando a las grandes cadenas a replantearse sus modelos de negocio tradicionales.

La compañía francesa mantiene, no obstante, su compromiso con el mercado español, donde asegura querer «continuar creciendo y creando valor en la sociedad española, avanzando en el desarrollo del comercio alimentario multiformato y multicanal, ofreciendo el precio más barato y asegurando un amplio surtido de productos y marcas, apostando por el desarrollo de grandes y pequeños proveedores nacionales y locales».

El plan de transformación de Alcampo refleja una tendencia global en el sector retail, donde la proximidad, la conveniencia y la experiencia de compra omnicanal están redefiniendo las estrategias de las grandes cadenas de distribución, obligándolas a adaptarse a un consumidor cada vez más exigente y con nuevas prioridades.