La caída del euríbor y los buenos resultados de los bancos han dinamizado el mercado inmobiliario en España, permitiendo la entrada de pequeños compradores porque el mercado de compraventa ya no se concentra sólo en perfiles de alto poder adquisitivo.
En este sentido, la caída del euríbor ha impulsado la firma de hipotecas a tipo fijo en España, con siete de cada diez nuevas hipotecas siendo de este tipo. Durante el segundo trimestre del año, las hipotecas fijas representaron el 71,30% del total, frente al 48,07% del primer trimestre. En contraste, las hipotecas a tipo mixto han disminuido a menos del 25% al cierre de junio, según las estadísticas de Trioteca, una empresa especializada en la búsqueda y contratación de hipotecas.
En junio, el 69,62% de las hipotecas fueron a tipo fijo, el 1,27% a tipo variable y el 29,11% a tipo mixto. Según Ricard Garriga, director general de Trioteca, este aumento en las firmas a tipo fijo refleja un cambio positivo en el sector inmobiliario. Tradicionalmente, los bancos ofrecían mejores condiciones en tipo mixto a perfiles menos atractivos, mientras que las hipotecas fijas se concentraban en perfiles premium. Sin embargo, esta tendencia se ha invertido al cierre del trimestre.
“Estamos presenciando el inicio de una revolución en el mercado hipotecario, y podríamos estar asistiendo a la extinción definitiva de las hipotecas mixtas”.
Garriga atribuye este cambio a dos factores principales, que él denomina como una «tormenta perfecta» positiva. En primer lugar, la rebaja de tipos del Banco Central Europeo (BCE), que se espera continúe en septiembre, ha tenido un impacto en el euríbor. En segundo lugar, los buenos resultados de los bancos este año les obligan a ofrecer créditos a más clientes, incluyendo a pequeños compradores, quienes ahora tienen acceso a préstamos a tipo fijo con tasas de interés más accesibles.
El perfil de los solicitantes de hipotecas en España también ha cambiado, al menos a corto plazo. Según Trioteca, la edad promedio de los compradores de vivienda se ha reducido a 39 años. Estos compradores son principalmente asalariados que solicitan préstamos de menor valor nominal, alrededor de 149.000 euros. El valor medio de las viviendas hipotecadas también ha disminuido, situándose en 227.000 euros en junio.
Sin embargo, Garriga advierte que esta reducción en el valor medio de las viviendas hipotecadas no implica una disminución en el precio de la vivienda. «La bajada del precio medio de las viviendas que vemos de mayo a junio confirma que ahora hay más perfiles con acceso a la compra de vivienda, pero adquieren propiedades más económicas. No se debe a que el precio de la vivienda realmente haya disminuido», explica. El mercado de compraventa ya no se concentra únicamente en perfiles de alto poder adquisitivo.
Por su parte, Gonzalo Bernardos, profesor de la Universidad de Barcelona y experto de Trioteca, señala que la difícil situación del mercado de alquiler en las principales capitales españolas y los menores intereses hipotecarios están llevando a muchos jóvenes a interesarse por las hipotecas crecientes. Estas hipotecas ofrecen cuotas más bajas en los primeros años, lo que resulta atractivo para aquellos que esperan un aumento en sus ingresos futuros. Aunque a largo plazo este tipo de préstamo es más caro, permite pagar cuotas asequibles al inicio, lo que es beneficioso para los jóvenes compradores.