Las falsificaciones generan un fuerte impacto negativo, en especial en el ámbito de los productos deportivos. Solo en España alcanzan los 84,07 millones de euros anuales, lo que representa un 12,5% del total de ventas del sector. Este dato posiciona a España como el quinto país de la Unión Europea (UE) más afectado por estas prácticas ilícitas, según la Oficina de Propiedad Intelectual de la UE (EUIPO).
A nivel europeo, las pérdidas por productos deportivos falsificados ascienden a los 851 millones de euros anuales, que equivalen al 11% de las ventas totales del sector. Francia, Austria y Países Bajos son los países con mayores pérdidas económicas, sumando cientos de millones de euros cada uno. La EUIPO, con sede en Alicante, destaca la gravedad del problema en toda la región.
Un preocupante 13% de los jóvenes españoles entre 15 y 24 años adquiere intencionalmente productos deportivos falsificados, superando la media europea del 10%. Solo Grecia, con un 18%, presenta cifras más altas. Además, un 7% de los jóvenes europeos compran estos artículos falsificados por accidente.
Pero el impacto de las falsificaciones es mucho mayor a los 850 millones de euros al año en el sector del equipamiento deportivo en la UE, sin contar otros artículos como camisetas de fútbol y zapatillas, forman parte del total estimado de 12.000 millones de euros anuales en prendas de vestir falsificadas en todo el continente.
En este sentido, la EUIPO subraya las graves consecuencias económicas y sociales de las falsificaciones, que van más allá de las pérdidas de ingresos y empleos. Las empresas ven dañada la reputación de sus marcas debido a la menor calidad de las copias, y hay un creciente escepticismo sobre la solidez de las inversiones en innovación, lo que pone en riesgo el desarrollo económico a largo plazo. Además, los productos falsificados plantean serias amenazas para la salud, ya que no cumplen con las normativas europeas en materia de salud, seguridad y protección ambiental.
En el ámbito de la piratería de eventos deportivos, un 42% de los jóvenes españoles ha pirateado eventos deportivos en el último año, situando a España como el segundo país de la UE en esta práctica, solo detrás de Bulgaria. A nivel general, un 19% de la población española ha pirateado eventos deportivos en directo, superando la media europea del 12%. La piratería genera ingresos ilegales de 1.000 millones de euros anuales, afectando también a la financiación del deporte.
Para evitar esta situación, la Comisión Europea ha adoptado medidas para combatir la piratería y las falsificaciones, incluyendo la creación de una red de autoridades administrativas especializadas y una mayor concienciación sobre la oferta de contenidos digitales legítimos. La EUIPO contribuye a estos esfuerzos mediante la difusión, aplicación y seguimiento de estas iniciativas.
En la lucha contra las falsificaciones, la Operación Fake Star, dirigida por la Policía Nacional de España y co-dirigida por la Policía de la República Helénica de Grecia, ha sido una de las mayores operaciones policiales en Europa. En 2023, se incautaron ocho millones de productos deportivos y de lujo falsificados, valorados en 120 millones de euros, y se detuvo a 264 personas. Además, se detectaron otros delitos graves, como delincuencia organizada, contrabando, fraude y blanqueo de capitales.