España destina cada vez más recursos a las nóminas y ayudas públicas. El Estado gasta anualmente 348.000 millones de euros que equivalen al 24% del PIB nacional.
En este cálculo se incluyen sueldos, pensiones, prestaciones por desempleo y el Ingreso Mínimo Vital (IMV), beneficiando a 16,3 millones de personas, es decir, a un tercio de la población española. Este grupo es casi tan numeroso como los trabajadores por cuenta propia y asalariados, que suman 17,7 millones de personas.
El aumento constante del gasto público en estas transferencias se debe, en gran parte, al incremento de las pensiones. Con 9,2 millones de jubilados, este es el grupo más grande, recibiendo más de 10 millones de pagas y representando un desembolso anual de 170.800 millones de euros. Se espera que este gasto siga creciendo con el retiro de la generación del baby boom, proyectándose que los pensionistas lleguen a ser 16 millones en las próximas décadas.
Los trabajadores del sector público, que superan los 3,5 millones, exigen un desembolso de más de 152.000 millones de euros anuales. Este monto incluye sueldos y complementos de altos cargos, funcionarios, personal laboral y trabajadores eventuales. En 2023, el aumento de las pensiones y salarios públicos incrementó el gasto en unos 25.000 millones de euros debido a la revalorización de las pensiones para compensar la inflación.
Funcas, think tank dedicado a la investigación económica y social, prevé que en 2024 el gasto en nóminas públicas y prestaciones de la Seguridad Social aumentará en 10.100 millones de euros adicionales. Esto elevará el desembolso total a más de 330.000 millones de euros.
El desempleo también representa un gasto significativo, con 1,8 millones de personas recibiendo prestaciones por desempleo, sumando unos 21.800 millones de euros en 2023. Además, 20.000 autónomos recibieron la prestación por cese de actividad, con un desembolso de 7.600 millones de euros.
El Ingreso Mínimo Vital es una prestación pensada para los hogares más vulnerables, que fue lanzada durante la pandemia. En el ejercicio pasado, se destinaron más de 3.500 millones de euros a casi 1,7 millones de personas y más de medio millón de hogares, con una ayuda media de 500 euros por hogar. Desde su inicio, el IMV ha beneficiado a 2,3 millones de personas en 770.000 hogares, representando el 4,6% de la población española, de acuerdo a las cifras oficiales.