El gasto en pensiones contributivas de España sigue con su tendencia al alza y ha marcado una cifra récord.
En el tercer mes del año, la partida alcanzó una cifra sin precedentes de 12.710,8 millones de euros, marcando un incremento del 6,2% respecto al mismo mes del año anterior, de acuerdo a los datos publicados por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Este aumento refleja no solo la tendencia creciente del gasto en pensiones, sino también el impacto de la reciente subida del 3,8% aplicada a las pensiones contributivas para el presente año.
Este nuevo récord en la nómina mensual ordinaria de pensiones contributivas se produce tras superar por primera vez los 12.000 millones de euros en julio de 2023. Estos datos ponen de manifiesto la presión continua sobre las finanzas públicas, en un contexto donde el gasto en pensiones ya representa el 11,5% del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
El número de pensiones contributivas abonadas en abril de este año fue de 10.149.834, lo que supone un incremento del 1,2% en comparación con el año anterior. Esto equivale a casi 9,2 millones de pensionistas, reflejando un aumento del 1,1%. Estos incrementos son indicativos del envejecimiento progresivo de la población y del aumento de la demanda por beneficios de jubilación.
Asimismo, la pensión media de jubilación ha visto un aumento significativo del 4,8% interanual, situándose en 1.439,1 euros mensuales. Este aumento es una consecuencia directa de la indexación de las pensiones al Índice de Precios al Consumidor (IPC), destinada a preservar el poder adquisitivo de los jubilados frente a la inflación. Del mismo modo, la pensión media del sistema, que incluye diferentes tipos de pensiones como las de incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares, se incrementó casi un 5%, alcanzando los 1.252,3 euros mensuales.
Este escenario subraya los desafíos continuos para el sistema de pensiones de España, que se enfrenta a la necesidad de garantizar la sostenibilidad financiera frente al aumento de las obligaciones de pago en un entorno de población cada vez más envejecida. El aumento constante del gasto en pensiones contributivas refleja tanto el compromiso del gobierno con el bienestar de los jubilados como la presión que esto impone a la economía nacional.