La reciente escalada de violencia entre Irán e Israel, desencadenada por el ataque del pasado fin de semana lanzado por Teherán, ha intensificado las tensiones entre estos dos enemigos históricos en el ámbito internacional. A pesar de la gravedad del conflicto y las críticas a Israel por su actuación en Gaza, los mercados han reaccionado de manera inesperada hasta el momento, entre ellos, el Ibex 35.
Los precios del crudo han mostrado una tendencia a la baja como respuesta inicial, desafiando las expectativas de un alza debido a la escalada de la violencia. Además, los mercados europeos y Wall Street han mantenido su estabilidad, a pesar del incremento en la tensión entre los dos países.
Expertos en defensa destacan que el ataque de Irán fue cuidadosamente planificado y dirigido principalmente contra objetivos militares, lo que limitó los daños materiales y evitó víctimas mortales. La mayoría de los proyectiles lanzados fueron interceptados por Israel con la ayuda de Estados Unidos y el Reino Unido. Esta respuesta limitada de Irán llevó a Estados Unidos a comprometerse a no colaborar con Israel en futuros ataques contra Irán.
El conflicto entre Irán e Israel presenta desafíos para Estados Unidos, especialmente en un año electoral. Una escalada de violencia podría aumentar los precios del petróleo, generando presiones inflacionarias que el presidente Joe Biden trata de evitar, mientras que el candidato republicano, Donald Trump, busca evitar cualquier conflicto militar.
Si la situación empeorara y los precios del petróleo se dispararan cerca de los 100 dólares por barril, el Ibex 35 experimentaría caídas generales, exacerbando las presiones inflacionarias y afectando negativamente a todos los valores del selectivo español. Sin embargo, Repsol, la única petrolera cotizada en España, podría beneficiarse de un aumento en el precio del petróleo en los mercados internacionales.
El sector turístico también sentiría el impacto de un alza en los precios del crudo, particularmente en compañías como IAG (Iberia), debido al encarecimiento del queroseno y la posible necesidad de aumentar los precios de los billetes. La incertidumbre causada por la escalada de violencia entre Irán e Israel continúa siendo una preocupación para los mercados financieros y las empresas afectadas.