“Nuestros ciudadanos invierten sus ahorros de modo manifiestamente mejorable”. Así de contundente se ha mostrado, Rodrigo Buenaventura, presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que ha expresado su preocupación por la forma en que los españoles están invirtiendo sus ahorros.
Durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados para presentar el informe anual de 2023, Buenaventura destacó que las inversiones de los ciudadanos se distribuyen mayormente en depósitos (38%), inversión directa como letras y bonos, renta variable y otro tipo de participaciones (32%); fondos y fondos de pensiones (15% y 4%), y con una proporción relativamente baja (11%) destinada en otros instrumentos financieros, como seguros.
«El ahorro de los españoles no parece muy alineado con la cartera ideal para necesidades de largo plazo, como el complemento para la jubilación. En esto no somos muy distintos de la media de los europeos, que tienen problemas muy similares».
El presidente de la CNMV hizo hincapié en la necesidad de fomentar el ahorro a largo plazo en instrumentos financieros y en que las empresas busquen recursos en los mercados como alternativa al crédito bancario. Destacó como una buena noticia el anuncio de una empresa española, Puig, que planea salir a Bolsa próximamente.
Buenaventura también advirtió sobre la dependencia excesiva de las empresas españolas del crédito bancario para financiar sus inversiones, lo que podría dificultar su acceso a la financiación necesaria para la transición energética, la digitalización y la inversión en defensa en la próxima década.
«Tenemos un problema en España y en el resto de Europa que es la dependencia bancaria que tienen nuestras empresas para financiarse. A diferencia de las empresas norteamericanas, las empresas españolas dependen tres veces más del crédito bancario que sus competidores estadounidenses y no complementan ese crédito con financiación en mercados».
En relación con los riesgos financieros, el presidente de la CNMV señaló que aproximadamente el 7% de los españoles han tenido o tienen criptomonedas. Aunque la regulación europea pretende supervisar y regular los proveedores de criptoactivos, Buenaventura advirtió que estas inversiones seguirán siendo extremadamente arriesgadas y poco recomendables para los inversores minoristas, incluso cuando estén reguladas.
Por último, Buenaventura hizo un llamamiento para un encaje armonioso y funcional de la nueva Autoridad del Cliente Financiero propuesta por el Gobierno, asegurando que es vital que esta autoridad interactúe de manera fluida con los supervisores financieros existentes y que sus decisiones sean coherentes con los criterios de supervisión aplicados diariamente.
«Es vital que haya mecanismos fluidos de interacción entre supervisores y el defensor del cliente. Y que este, al resolver las reclamaciones o unificar doctrina, lo haga con criterios plenamente consistentes con los criterios de supervisión que aplicamos día a día los supervisores».