La marihuana es legal en Alemania. El país teutón ha dado un paso significativo en la despenalización del consumo recreativo de cannabis, con la entrada en vigor de una nueva normativa a partir de este lunes.
La medida, aprobada por el Consejo Federal Alemán ‘Bundesrat‘, permite a los adultos mayores de 18 años poseer hasta 50 gramos de cannabis seco en sus hogares y hasta 25 gramos en público para uso personal. Además, la normativa permite el cultivo doméstico, al establecer que una persona mayor de edad puede poseer hasta tres plantas en su residencia.
Sin embargo, la distribución y venta de cannabis para uso recreativo estará restringida a asociaciones de cultivo, conocidas como Clubes Sociales de Cannabis. Estos clubes podrán suministrar marihuana a sus miembros, pero el consumo no estará permitido en sus instalaciones.
Esta decisión coloca a Alemania en línea con otros países europeos que han adoptado medidas similares, como Malta en 2021 o Luxemburgo en 2023. Sin embargo, contrasta con países como Francia u Holanda, donde el consumo de hachís se tolera pero sigue siendo ilegal.
El ministro alemán de Sanidad, Karl Lauterbach, ha argumentado que la nueva ley tiene como objetivo combatir el tráfico ilegal de marihuana y garantizar un producto seguro y de calidad para los consumidores. Además, se espera que contribuya a reducir la delincuencia asociada al mercado negro.
A partir del 1 de julio, se espera que la normativa tenga un segundo desarrollo, permitiendo a los Clubes Sociales de Cannabis cultivar de forma colectiva y suministrar marihuana a sus miembros. Estos clubes, que funcionan como asociaciones sin ánimo de lucro, podrán tener hasta 500 personas residentes en Alemania como miembros.
Sin embargo, la nueva ley no está exenta de críticas. La Policía y la Federación de Jueces Alemanes han expresado su preocupación por el aumento de la carga de trabajo y la complejidad burocrática que podría generar. Además, la oposición conservadora ha cuestionado los planes del Gobierno, argumentando que la legalización podría tener efectos contraproducentes y alejar aún más a la ciudadanía de las preocupaciones más importantes.