La implementación de la reforma laboral no ha logrado mejorar de manera significativa la situación de las mujeres en el mercado laboral español.
Aunque la medida impulsada por la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha generado cambios importantes en el mercado laboral, con una marcada reducción de los contratos temporales, las desigualdades de género persisten y se reflejan en el tipo de empleos que ocupan las mujeres.
A pesar de representar el 52% de todos los empleos creados desde la entrada en vigor de la reforma laboral, las mujeres continúan enfrentando obstáculos significativos en términos de estabilidad laboral y calidad de empleo. Mientras que los hombres han obtenido una proporción considerablemente mayor de empleos indefinidos a tiempo completo, las mujeres se encuentran sobrerrepresentadas en empleos temporales y a tiempo parcial.
El reparto desigual de la mejora en la calidad del empleo entre géneros refleja una brecha persistente en el mercado laboral. A pesar del descenso en la temporalidad y el aumento de los empleos indefinidos, las mujeres continúan enfrentando condiciones laborales desfavorables en comparación con los hombres. Esta disparidad refleja una falta de avance significativo en la reducción de las desigualdades de género en el ámbito laboral.
Los datos muestran que la proporción de asalariadas con empleos temporales ha disminuido en 14,5 puntos desde la implementación de la reforma laboral, pero aún se sitúa en el 15,39%. En contraste, la proporción de hombres en empleos temporales ha caído en 15,9 puntos, ubicándose en el 10,17%. Además, el aumento del empleo indefinido a tiempo completo entre las mujeres ha sido más moderado en comparación con los hombres, lo que refleja la distribución desigual de la mejora del empleo.
Aunque se esperaba que la reforma laboral contribuyera a cerrar la brecha de género en el mercado laboral, los resultados muestran lo contrario. A pesar de los esfuerzos gubernamentales por abordar estas desigualdades, la reforma laboral no ha logrado cambiar de manera significativa la situación de las mujeres en el ámbito laboral. Es evidente la necesidad de adoptar medidas adicionales que aborden de manera más efectiva las desigualdades de género y promuevan la igualdad de oportunidades en el mercado laboral español.