La publicación de las cuentas auditadas por KPMG ha generado un impacto positivo en el mercado para Grifols, con un significativo repunte en el valor de sus acciones.
La farmacéutica ha dado un giro en el mercado tras la publicación de sus cuentas anuales aprobadas por la firma KPMG. Con un informe “sin salvedades”, las acciones de la Grifols se elevaron en un 19%, un día después de sufrir una caída del 34% debido a la ausencia del sello del auditor. Pese a esperar al último día para presentar el balance auditado, la empresa, que había perdido aproximadamente la mitad de su capitalización en el transcurso del año, ve con cierto alivio la respuesta de los inversores.
Sin embargo, la compañía continúa enfrentando desafíos financieros y regulatorios que requieren una atención cuidadosa en los próximos períodos y que serán examinados con lupa por los capitales. El cambio en la firma auditora y la renovación en el consejo de administración marcan uno de los aspectos de más peso en la empresa. Además, está la tarea de mantener su posición en el mercado ante las preocupaciones de los inversores y reguladores.
Las últimas cuentas firmadas por KPMG marcan el final de una larga asociación entre la farmacéutica y la firma auditora, con Deloitte asumiendo el relevo a partir de este ejercicio. Este cambio, acordado en la junta general de accionistas, sigue una necesidad legal y refleja los cambios que ha tenido que hacer la empresa ante los problemas recintes. Otro ejemplo, son los cambios en la estructura interna, con la despedida de Raimon Grifols, Víctor Grifols Deu y Albert Grifols Coma-Cros de sus cargos ejecutivos dentro del consejo de administración.
A pesar de estos desarrollos positivos, Grifols enfrenta desafíos financieros y regulatorios adicionales. Gotham reveló otro informe en el que la compañía no queda bien parada.
A eso, se suma que la agencia de calificación Moody’s ha puesto su rating en revisión para una posible rebaja, citando preocupaciones sobre la menor generación de efectivo y los retrasos en la publicación de las cuentas auditadas. Esta situación ha despertado la atención de los reguladores financieros, con el presidente de la CNMV anunciando que se están llevando a cabo análisis exhaustivos sobre la información proporcionada por Grifols, lo que sugiere un escrutinio adicional sobre la empresa.