Bruselas, a través del portal comunitario Rapid Alert System Feed and Food (RASFF), ha alertado sobre la “presencia de Hepatitis A en fresas de Marruecos” detectada en un cargamento de fresas en un punto de entrada de España. Pese al riesgo potencial, todavía no hay alerta sanitaria.
La detección de Hepatitis A en fresas procedentes de Marruecos ha generado una alerta alimentaria que destaca la importancia de la seguridad alimentaria, en especial con el campo europeo protestando, y la cooperación internacional en la gestión de riesgos sanitarios. El portal RASFF identificó la presencia de esta sustancia en un punto de entrada en España, lo que llevó a la activación de medidas urgentes por parte de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA).
La preocupación radica en que las fresas, antes de llegar al mercado, fueron interceptadas en la aduana, lo que evitó que llegaran a los puntos de venta. Sin embargo, la seriedad de la alerta radica en que la presencia de Hepatitis A superaba los niveles máximos permitidos, lo que sugiere un potencial riesgo para la salud pública. Se sospecha que esta contaminación pudo deberse al riego de las explotaciones agrícolas con aguas fecales.
Ante esta situación, la Asociación Valenciana de Agricultores ha instado al Gobierno central y a la Unión Europea a tomar medidas concretas para evitar futuros incidentes similares. Se solicita una inspección sanitaria exhaustiva de todas las fresas provenientes de Marruecos y una acción coordinada para garantizar la seguridad alimentaria.
La demanda de acción también se ha extendido a instancias internacionales, como Asaja Bruselas, para abordar la problemática a nivel comunitario. Además, se ha informado a asociaciones de consumidores y al Colegio Oficial de Médicos de Valencia (COMV) sobre la alerta, subrayando la importancia de proteger la salud de los consumidores.
Pese a la alerta, expertos sanitarios recuerdan que no existe una alerta sanitaria ni se ha informado de ningún afectado por lo que llaman a evitar el pánico y a divulgar falsas informaciones.
Este incidente resalta la necesidad de una regulación efectiva en la cadena de suministro de alimentos y la importancia de la vigilancia sanitaria en la producción agrícola, en especial en productos que provienen fuera de la Unión. La cooperación entre países y organismos es fundamental para detectar y gestionar eficazmente riesgos sanitarios, protegiendo así la salud pública y garantizando la seguridad alimentaria.