La presión inflacionaria ha desencadenado una tendencia positiva en los salarios en España en los últimos años, intensificándose en 2023. Según el Monitor Adecco de Salarios, el sueldo medio experimentó un notable aumento del 5.1%, alcanzando los 1,920 euros mensuales. Este incremento superó la inflación media del pasado año, que se situó en el 3.5%. Aunque este dato es positivo a nivel nacional, al analizar las autonomías se revelan disparidades significativas.
En términos nominales, los salarios de todas las regiones de España alcanzaron cifras históricas máximas. Sin embargo, las diferencias entre los aumentos salariales son evidentes. Baleares lidera el grupo con un impresionante 7.7%, seguida de cerca por la Comunidad de Madrid con un 6.7% y Navarra con un 6.2%. En contraste, Extremadura, Cantabria y Canarias registran incrementos más moderados, situándose entre el 3.1% y el 4%.
La brecha salarial entre la comunidad autónoma con el salario más alto y la de menor salario se amplió en 2023, llegando a los 749 euros, un aumento del 15% interanual. Al observar la diferencia entre la media de las tres comunidades con los salarios más elevados y las tres con los salarios más bajos, esta brecha se sitúa en 578 euros, un incremento del 10.3% interanual.
Al clasificar las comunidades según sus salarios, se observa que Madrid lidera el ranking, con una remuneración media de 2,282 euros mensuales, experimentando un aumento del 6.7% interanual. Le siguen el País Vasco, Navarra y Cataluña. Estas cuatro regiones no solo superan la media nacional, sino que también han experimentado aumentos más significativos en comparación con años anteriores.
Sin embargo, a pesar de estos incrementos, el poder adquisitivo del salario medio en España disminuyó por segundo año consecutivo. Según el análisis de Adecco, al descontar la inflación, la variación del poder de compra se situó en -2.6% en 2023, lo que equivale a 610 euros menos al año. Este dato refleja una preocupación persistente en el panorama económico.
Quince regiones experimentaron una disminución en su poder adquisitivo, siendo Asturias la más afectada con una caída del 5%. Otras regiones, a pesar de mostrar mejoras respecto al año anterior, aún muestran una pérdida en su capacidad de compra. Canarias, por ejemplo, pasó de ganar un 11% en 2022 a un 2.1% en 2023.
En resumen, aunque los salarios en España han experimentado aumentos notables, las disparidades regionales, la ampliación de la brecha salarial y la disminución del poder adquisitivo plantean desafíos económicos significativos. Las políticas que aborden estas disparidades se vuelven esenciales para garantizar un crecimiento económico sostenible y equitativo en todo el país.