Desde el inicio de la pandemia, la mayoría de las familias en España ha experimentado una pérdida de poder adquisitivo constante. La combinación de la presión económica generada por la COVID-19, que llevó a muchas familias a utilizar sus ahorros, junto con la persistente inflación de los últimos años, ha resultado en que menos de una de cada cuatro hogares sea capaz de ahorrar al final de cada mes. Estos hallazgos se desprenden del «Informe Europeo de Pagos de Consumidores», elaborado anualmente por Intrum.
El informe aborda la cuestión de si, al final de cada mes, los consumidores gastan más, menos o igual a lo que ingresan. Se estima que el 48% gasta la misma cantidad que ingresa, un 28% debe recurrir a ahorros o ayudas porque gasta más de lo que genera, y solo el 24% es capaz de gastar menos de lo que ingresa.
En consecuencia, más del 75% de los consumidores no logran generar ningún ahorro, y aproximadamente una cuarta parte de ellos pierde parte de sus ahorros mes a mes. Esta pérdida adquisitiva es significativamente mayor en comparación con el año 2019, cuando el promedio de ahorro era del 20%.
La situación en este aspecto es similar en el resto de Europa, donde también tres de cada cuatro consumidores indican que, en un mes típico, o están equilibrados o gastan más de lo que pueden.
Familia
La pérdida de ahorros
El panorama del ahorro es motivo de preocupación al analizar los datos. Muchos consumidores tienen un colchón limitado o nulo al cual recurrir para enfrentar gastos inesperados. Casi un tercio de ellos indica tener el equivalente a un mes o menos de ingresos para hacer frente a imprevistos, mientras que un 17% no cuenta con ahorros para cubrir ese tipo de gastos.
Año tras año, se observa un aumento en el número de encuestados que afirman tener ahorrado menos de un mes o incluso nada de sus ingresos para afrontar gastos inesperados. En la actualidad, el 33% de los españoles se encuentra en esta situación, marcando un aumento frente al 27% en 2022 y al 20% en 2021. En consecuencia, enfrentar gastos imprevistos, como reparaciones de automóviles o facturas veterinarias, podría llevarlos a endeudarse, posiblemente a tasas de interés elevadas.
Además, el gasto medio en los hogares españoles supera en 328 euros las capacidades de las familias para cumplir con sus compromisos esenciales, representando un exceso del 34% sobre los ingresos mensuales promedio. A nivel europeo, el 24% de los consumidores gasta más de lo que sus posibilidades permiten, superando su presupuesto en un promedio de 232 euros. Esto implica un gasto adicional que representa más del 40% de lo que una persona con ingresos medios ganaría en ese periodo.
La inflación
El informe destacado refleja nuevamente que el aumento del costo de vida está empeorando la situación de los consumidores españoles en comparación con años anteriores. De hecho, la mitad de los consumidores indica que, después de cubrir los gastos esenciales, cuentan con menos dinero ahora que hace un año. Además, según Intrum, el 59% podría cancelar sus vacaciones en estas semanas, mientras que el 67% afirma que podría gastar menos en Navidad.
La difícil situación económica ha llevado al 71% de los encuestados a intentar reducir sus gastos diarios, y el 28% se ve obligado a utilizar sus ahorros para hacer frente a sus pagos cotidianos. Por último, este año, uno de cada cinco consumidores ha experimentado retrasos en el pago de alguna factura, representando un leve aumento en comparación con el 20% registrado en 2022.