Yolanda Díaz quiere obligar a Pedro Sánchez a ‘tragar’ con las reformas laborales vetadas por Nadia Calviño.
Según explica ‘Vozpópuli’, la vicepresidenta segunda quiere arrancar la legislatura con un endurecimiento del despido en el programa de Gobierno, junto con otras exigencias laborales como los permisos y la jornada y en materia de vivienda que el PSOE no ve con buenos ojos. Y muy especialmente, Nadia Calviño, que desautorizó a Díaz la pasada legislatura respecto al despido, y que ha mantenido un pugilato constante con la ministra de Trabajo en el resto de cuestiones que Sumar plantea como exigencia en la negociación.
Esta apuesta fuerte por asuntos en lo que no hay en principio consenso permitirá extender la negociación lo que sea necesario para Carles Puigdemont.
La preferencia de Díaz por un endurecimiento en las normativas de despido, que ella considera «poco costoso», pero que había presentado anteriormente como un enfoque restaurativo o a medida durante los últimos meses de la pasada legislatura, se desvaneció durante la campaña electoral de Sumar para las elecciones generales. En ese momento, centró su atención en la herencia universal y en aumentar los impuestos.
Sin embargo, el tema del despido ha vuelto a cobrar relevancia para Díaz y sus representantes. Carlos Martín, diputado por Madrid de Sumar y una de las principales voces económicas del partido, ha respaldado la idea de aumentar las indemnizaciones por despido. Cree que esto fortalecería el equilibrio en las negociaciones entre empresarios y trabajadores. Según él, incrementar esta indemnización, actualmente establecida en 33 días por año trabajado, ayudaría a reestructurar la relación entre empleados y empleadores. Martín, exdirector del gabinete económico de CCOO, afirmó en Twitter que este paso, que se inició en la legislatura anterior, ha contribuido significativamente a la fortaleza actual de la economía española.
El tema del costo del despido fue un punto de conflicto entre el PSOE y sus socios durante la pasada legislatura. ERC y Bildu no respaldaron la reforma laboral porque no aumentaba la indemnización por despido improcedente a 45 días.
Nacho Álvarez, portavoz económico de Sumar, señaló que las diferencias con el PSOE para llegar a un acuerdo de gobierno radican en cuestiones laborales y derechos sociales. Mencionó que no hay consenso sobre la reducción de la jornada laboral y la regulación de los despidos. Afirmó que la reunión entre Sánchez y Díaz no se centró en la amnistía, ya que ambos coinciden en ese tema.

Pedro Sánchez y Nadia Calviño
El problema de Calviño
El equipo negociador del PSOE está compuesto por los diputados Óscar Puente y José Ramón Gómez Besteiro, María Jesús Montero (vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda en funciones), Santos Cerdán (secretario de Organización del PSOE), Pilar Alegría (portavoz del PSOE y ministra de Educación en funciones), Hana Jalloul (secretaria de Política Internacional y Cooperación del PSOE) y Félix Bolaños (secretario para la Reforma Constitucional y Nuevos Derechos del PSOE, y ministro de la Presidencia en funciones). En los asuntos relacionados con Cataluña, el líder del PSC, Salvador Illa, será el encargado de informar directamente a Sánchez.
A pesar de que en un par de semanas Nadia Calviño podría ser elegida presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI), su influencia no disminuye por ahora. En caso de ser elegida, tendría que abandonar el Gobierno en diciembre, lo que abriría el camino para que Díaz promueva las propuestas que Calviño ha vetado hasta el momento.