A Pedro Sánchez parece preocuparle más el postureo que por las grandes oportunidades que se le escapan a España.
El magnate sudafricano está avanzando en su proyecto de implementar su planta de Tesla en Europa. Un proyecto donde Italia y Francia se posicionan como los grandes favoritos, mientras que España parece haberse quedado fuera de la fórmula.
El dueño de Tesla y de Twitter se reunió con Giorgia Meloni y Emmanuel Macron, pero no tuvo tiempo en su agenda para verse con el presidente del Gobierno. Un duro golpe para Moncloa, ya que la multinacional norteamericana trabaja desde hace un año con la Generalitat Valenciana para ubicar una fábrica de vehículos eléctricos en Valencia.
Una iniciativa que ahora parece tambalear ante el protagonismo asumido por Italia y por Francia.
Todo apunta a que el Gobierno de Pedro Sánchez desperdició la gran oportunidad de conquistar la millonaria inversión que Tesla tenía previsto realizar en Valencia.
Casi tres semanas después de que saliera a la luz la intención de la compañía de Elon Musk de instalarse en la Comunidad Valenciana, las negociaciones están absolutamente rotas. Así lo reconoció el propio Ximo Puig, según adelanta ‘Economía Digital’.
“Ximo Puig dijo que el tema de Tesla salió a la luz por una filtración interna que encabronó mucho a Tesla”, desvela el citado medio, donde precisan que el socialista no habría sido quien rompió el silencio sobre las negociaciones.
Todo salió a la luz el 8 de junio, cuando se conoció que Tesla tanteaba Valencia como opción para su segunda fábrica en Europa. Después de perder el gobierno valenciano y en plena pugna interna en el PSOE por las listas del congreso, en las que Ximo Puig no ejerció como el barón que controla las filas, se produjo la fuga de información. El que fue presidente de la Generalidad no pudo controlar a lo que fue su equipo, lo que dinamitó su prestigio.
Tampoco ayudó en este asunto el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Como ya ocurriera durante la campaña de las autonómicas y municipales, los intereses nacionales pasaron por encima de los valencianos. Lejos de poner el foco en los objetivos del ejecutivo de Puig, Sánchez se quedó fuera de la ronda de visitas del CEO de Tesla.
Pedro Sánchez y Elon Musk
Sánchez a la desesperada
Ahora, el candidato del PSOE quiere reconducir el proceso para reforzar su imagen de líder internacional y ganar ‘puntos’ de cara a las elecciones generales.
Vozpópuli asegura que esta batalla por lograr una inversión de 4.500 millones de Tesla la ha liderado el presidente en funciones valenciano, Ximo Puig, mientras “Madrid estaba a otras cosas”. Puig dejará a partir de la semana que viene su cargo y presiona a Moncloa para que apure la campaña y avanzar con un acuerdo que, en el caso de conseguirlo, corre el riesgo de que los futuros gobiernos del PP se atribuyan todo el mérito.
Sánchez acepta el reto porque la foto con Musk, junto con las primeras semanas de presidencia del Consejo de la UE, le dan energía en esta campaña. El máximo dirigente de Tesla visitó el pasado mes de junio Italia y Francia, donde se reunió con sus presidentes. El siguiente objetivo parece ser Portugal y donde el actual Gobierno español podría aprovechar la oportunidad.
Tesla no ha querido valorar ante la consulta de este medio si existe esta posibilidad, tampoco Moncloa. Sánchez no podrá recurrir a sus ‘buenas relaciones’ con Joe Biden y la embajada de Estados Unidos para este enlace. Como explican conocedores de la burocracia comercial a este medio, está “muy mal visto” que una embajada estadounidense impulse una inversión y la generación de puestos de trabajo fuera de su territorio. Otro asunto es que, una vez instalados en España, se conviertan en los mayores defensores de “sus” empresas.
Otro factor que dificulta este plan es que el Gobierno no puede tomar ninguna decisión relevante en plena campaña para captar el interés de Tesla y que corre el riesgo que un acto institucional sea descalificado por la propia Junta Electoral Central de España. A ello, se suma que existe un “parón burocrático”, habitual en estos casos, que no permite a los técnicos del Gobierno pelear con todos sus argumentos por lograr que Musk visite España y anuncie su fábrica en Valencia.
Las ideas claras
Tesla tiene sus metas claras: levantar en suelo europeo la que sería su segunda planta de vehículos eléctricos. Pese a que la oferta de Valencia es la que más tiempo lleva cocinándose, Francia e Italia pujan con fuerza. Más aún en el primer caso, ya que Macron se ha propuesto la electrificación como una de sus medidas estrellas.
Se trataría de la segunda planta de Tesla en territorio comunitario tras la inauguración de la gigafactoría de Berlín, la cual fue inaugurada el año pasado.
La de nueva inversión sería la séptima fábrica de Tesla en el mundo. Y es que el fabricante norteamericano tiene un total de seis fábricas repartidas por el globo (California, Nevada, Nueva York, Texas, Shanghái y Berlín). Ahora la duda recae en si será Valencia quien finalmente se adjudique el proyecto o si Italia o Francia lograron aprovechar el terremoto político de España para hacerse un hueco en las negociaciones.